Normas de clase y urbanidad para los invitados a un funeral

funeral director showing sympathy

Cuando fallece un ser querido o un viejo amigo, es normal que en el funeral encontremos actitudes poco acordes al acto de homenaje que se está llevando a cabo. Por ello, desde Funeraria San Nicolás queremos ofrecerte ciertas normas de clase y urbanidad para invitados a un funeral.

Empecemos con cosas bastante sencillas. En primer lugar, vestirse de negro para la ocasión, que es de rigor, aunque no obligatorio, no es razón para usar el conjunto oscuro más llamativo que tengamos. No es aconsejable acudir con colores chillones, como ese traje amarillo o ese vestido fucsia, pero tampoco tenemos que vestir un negro que deje a la vista gran parte de nuestro cuerpo, un poco de decoro.

Otro elemento común a evitar es responder llamadas, estar con el móvil o de cháchara durante la ceremonia o el velatorio. Pese a que no sea un momento agradable, no hay que amenizar el funeral con chistes o comentarios graciosos, así como evitar estar a otras cosas o hablando de negocios o con llamadas que no sean de estricto rigor, para las cuales los mejor es salir fuera del tanatorio.

Un aspecto que a veces es imposible evitar, pero siempre que se pueda es buena idea. No lleves a los niños. No es buen plan meterlos durante cierto tiempo en una sala con gente triste y preocupada, gente llorando o gente que no conoce que se acerca a dar el pésame. Desentonarán y si se los lleva, lo mejor es que le de un entretenimiento no electrónico que les permita divertirse sin hacer ruido.

Por último, y muy importante, evite las frases manidas, todo el mundo está cansado de escucharlas y no ayudan a nadie. Un abrazo sentido y el pésame es más que suficiente en muchos casos.